Lo de ser autónomo.   Editorial

Lo de ser autónomo.

Un día mas que te levantas con una cascada de preocupaciones y de tareas, no sabes si el día te va a dar de sí.

Pero no piensas en nada mas no tienes tiempo para pararte a pensar si tu vida merece la pena como el que va a la fabrica el taller o la oficina, no te paras a pensar si tu jefe es malo o bueno, si te explota o no, no te preocupan puentes ni vacaciones, ni si el convenio ha subido este año o ha bajado.

¿Qué suerte? ¿No?

Tú tienes bastante con pensar en que hoy son 300 euros de factura eléctrica y mas la renta del local y el material que tienes pedido para la reforma que empiezas pasado mañana son 1.997 euros a pagar y en caja tienes poco más de 1.180 euros.

Pero no es todo porque a principios de la semana que viene, toca trimestral de I.V.A e I.R.P.F, Que casi se junta con el recibo de la S.S de autónomos, como mínimo otros 1.400 euros.

¡¡¡Y  tú con seis facturar en el cajón sin cobrar de casi tres meses atrás, casi 8.000 euros!!!.

 Pero claro eso a tus acreedores bien sean instituciones públicas o bancarias no les importa, ellos no les importa si tu arreglaste la fuga de Arantxa, la chica de Santutxu que no tiene seguro porque no puede pagarlo, porque lleva 3 años sin trabajo tiene dos niños y hay que darles de comer,

o la reparación de la puerta que hiciste a la asociación de vecinos que algún desalmado reventó y no tenían suficiente ni para pagar los materiales.

A la vez te viene a la cabeza que en casa hay que cambiar la nevera que lleva tres meses estropeando comida y que hay que comprar al peque botas de invierno y ropa que este ultimo estirón no lo ha consultado contigo.

 y decirle a tu pareja que agradeces que este hay otra vez…. porque no llegas… ¡¡¡otra vez!!!

Pero este negocio es tu vida, es tu proyecto, tu esfuerzo, tu ilusión, tu vocación, tus ahorros, y con lo que día a día quieres dar un futuro mejor a tu familia.

Y hay días que piensas que puede ser tu ruina y la de los tuyos, no sabes si lo estás haciendo bien, si es hora de abandonar, si lo cuentas o lo callas.

Pero ese momento pasa y a la mañana siguiente en cuanto te despiertas en cuanto te levantas, otra cascada de ocupaciones y preocupaciones te devuelve a la lucha diaria y a ese gen del autónomo que nunca nos deja  mirar atrás.

¡¡¡AUTONOMOS AURRERA!!!!